El verano es esa estación que todos soñamos, pero que nuestra piel teme. El calor, la exposición solar, el cloro, el sudor… pueden poner en jaque el equilibrio cutáneo si no lo cuidamos con mimo. Por eso, ahora más que nunca, es momento de invertir en tratamientos que preparen, protejan y reparen la piel. Hoy quiero compartir con vosotros una selección de los más efectivos —tanto faciales como corporales— para que este verano te sientas (y te veas) espectacular. Y no me olvido de ellos: también hablaremos de las preocupaciones masculinas más comunes, y de cómo tratarlas con éxito.
Tratamientos femeninos: belleza con propósito
FACIAL 1 · Ultraformer MPT: efecto lifting sin bisturí
Si buscas un rostro firme, redefinido y sin flacidez antes de las vacaciones, este es tu protocolo. Ultraformer MPT es nuestro tratamiento estrella: una tecnología de ultrasonido micro y macrofocalizado que actúa a distintas profundidades de la piel. ¿El resultado? Efecto lifting inmediato, pómulos elevados, óvalo más definido y papada difuminada. Todo, sin agujas ni recuperación. Ideal para quienes quieren lucir buena cara, con efecto filtro, sin maquillaje.
FACIAL 2 · Facial Neoderma: limpieza profunda y detox estival
Uno de nuestros rituales más demandados, sobre todo en esta época. Se trata de una higiene facial avanzada que combina extracción manual con una mascarilla purificante de bioalgas. Limpia, oxigena y devuelve la luminosidad a las pieles apagadas o congestionadas por el sudor, el maquillaje o el uso constante de protector solar. Es un reset completo para el rostro.
CORPORAL 1 · Wonder Abdomen: marcación y tonificación real
Si sueñas con un abdomen más plano y firme pero no consigues resultados con el gimnasio, Wonder es tu tratamiento. Este dispositivo estimula simultáneamente los músculos abdominales con tecnología electromagnética y radiofrecuencia, tonificando y quemando grasa localizada. Ideal para preparar la silueta antes de la playa o mejorar esa zona rebelde tras el embarazo o la menopausia.
CORPORAL 2 · Remodelage: esculpir, drenar y redefinir
Un clásico que nunca falla. Remodelage es un masaje manual profundo que activa la circulación, drena líquidos y moldea la figura. Perfecto para piernas pesadas, celulitis o simplemente para redefinir el contorno corporal. Muchas clientas lo combinan con aparatología para un efecto aún más visible.
Tratamientos masculinos: resultados sin complicaciones
FACIAL 1 · Hydrafacial Hombres: limpieza, hidratación y detox
Los hombres cada vez se cuidan más, pero buscan rutinas eficaces y sin complicaciones. Hydrafacial es perfecto para ellos: limpia, exfolia e hidrata en una sola sesión, eliminando impurezas y devolviendo frescura al rostro. Es ideal para pieles expuestas al afeitado, al sol o al estrés. Sin rojeces ni tiempos de recuperación.
FACIAL 2 · Kinesiolifting: efecto tensor sin cirugía
Este masaje facial combina maniobras de lifting manual con activos reafirmantes para suavizar arrugas y elevar los rasgos. Es una opción excelente para hombres a partir de los 40 que buscan un efecto “buena cara” sin recurrir a procedimientos invasivos. El rostro se ve más firme, descansado y rejuvenecido.
CORPORAL 1 · Wonder Brazos: tonificar sin pesas
Muchos hombres entrenan, pero les cuesta definir bíceps y tríceps. Wonder Brazos trabaja con una estimulación muscular tan intensa que multiplica los resultados del entrenamiento convencional. En pocas sesiones, se nota más tono, más volumen y mejor definición. Perfecto para quienes quieren mejorar sin pasar horas en el gimnasio.
CORPORAL 2 · Indiba Reducción + Drenaje
Indicado para eliminar grasa localizada y mejorar la retención de líquidos. Ideal en el abdomen o los flancos (las temidas “cartucheras masculinas”), este tratamiento con radiofrecuencia activa el metabolismo celular, reduce volumen y mejora la textura de la piel. Un básico de verano para quienes quieren verse mejor con o sin camiseta.
Cómo mantener en casa lo que conseguimos en cabina
Los tratamientos profesionales son ese empujón que la piel necesita. Pero si queremos que sus efectos se mantengan, el cuidado en casa es imprescindible. No tiene por qué ser complicado, pero sí constante. Aquí van mis consejos clave:
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Limpieza diaria (mañana y noche). Aunque no te maquilles, la piel acumula impurezas, sudor y protector solar. Usa un limpiador suave adaptado a tu tipo de piel.
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Hidratación y antioxidantes. El sérum con ácido hialurónico o vitamina C es perfecto en verano. Hidrata, protege del sol y mejora la luminosidad.
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Protección solar siempre. Aunque esté nublado. Y recuerda reaplicar si estás en la playa o haciendo deporte.
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Masajes o rodillo de jade. Estimulan la circulación, desinflaman y son un gesto de autocuidado que la piel agradece.
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Body brush y exfoliación semanal. El cepillado en seco y una exfoliación suave mejoran la textura corporal y potencian la absorción de cosméticos.
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Activos reafirmantes. En casa, aplica cremas corporales con cafeína, centella asiática o retinol (por la noche) para mantener el tono y la firmeza.
Un consejo más ¿qué alimentación debemos hacer en casa para cuidar la piel y el cuerpo en verano?
No basta con cuidarnos desde fuera. Una piel y un cuerpo saludables se cultivan desde el interior, a través de lo que comemos, de cómo nos hidratamos y de los hábitos que mantenemos a diario.
1. Hidrátate más y mejor
El agua es el gesto más sencillo —y más poderoso— para mantener la piel flexible, luminosa y libre de toxinas. En verano, con el sudor y las altas temperaturas, perdemos líquidos constantemente, y muchas veces no nos damos cuenta. Por eso insisto: bebe antes de tener sed. Lleva siempre una botella contigo y apuesta por infusiones frías, aguas saborizadas con frutas o zumos naturales sin azúcar. Una piel hidratada desde dentro es una piel más resistente al sol y al envejecimiento.
2. Apuesta por frutas y verduras de temporada
El verano es la estación ideal para llenar el plato de color. Sandía, melón, cerezas, albaricoques, tomates, pimientos, pepino… Todos están repletos de antioxidantes, vitaminas y agua. Estos alimentos no solo nos hidratan y nos refrescan, sino que combaten los radicales libres que genera la exposición solar. Además, mejoran la elasticidad de la piel, refuerzan la barrera cutánea y contribuyen a ese efecto “buena cara” que tanto buscamos.
3. Reduce las comidas copiosas y el exceso de sal
Las digestiones pesadas no solo nos roban energía, sino que se reflejan en una piel más apagada, hinchada y con menos vitalidad. En esta época es preferible optar por comidas ligeras, bien combinadas, que nos aporten nutrientes sin saturar el organismo. Evita embutidos, fritos, procesados o salsas pesadas, y modera la sal para prevenir la retención de líquidos. Tu abdomen, tus piernas y tu rostro te lo agradecerán.
4. Incorpora grasas saludables que nutran desde dentro
El aguacate, los frutos secos, el aceite de oliva virgen extra o el pescado azul aportan ácidos grasos esenciales que ayudan a mantener la piel elástica, jugosa y protegida. Estas grasas buenas también son fundamentales para mantener nuestras hormonas en equilibrio y reforzar la estructura celular. Eso sí, en su justa medida, siempre dentro de una dieta equilibrada y adaptada a nuestras necesidades.
5. No te olvides del colágeno, el zinc y la vitamina C
Si quieres potenciar los efectos de tus tratamientos corporales y faciales, añade a tu alimentación diaria ingredientes que estimulen la síntesis de colágeno, como el caldo de huesos, las semillas de chía, los cítricos, los frutos rojos o los suplementos específicos. El colágeno es una proteína clave para mantener la firmeza y elasticidad de la piel, pero su producción natural disminuye con la edad… ¡y el sol acelera ese proceso! Por eso es tan importante cuidarlo especialmente en esta época.
Recuerda:
Cada verano nos brinda la oportunidad de cuidarnos desde otro lugar, con más luz, más tiempo y más motivación. Y no hay mejor regalo que una piel sana, firme y luminosa. Nosotras te acompañamos desde el primer diagnóstico hasta tu rutina de verano perfecta.
Porque cuando tú te sientes bien, se nota. Y eso… también es belleza.
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