Sin duda, la celulitis (que no es exactamente lo mismo que la grasa localizada pero que están íntimamente relacionadas), es la preocupación estética corporal más común entre las mujeres. Afecta a casi el 98% de los cuerpos femeninos occidentales, tengan la complexión que tengan. Se trata de un problema que precisa de soluciones multidisciplinares, de cuidados constantes para combatirlo con eficacia, de tratamientos que mantengan a raya a los adipocitos, las células grasa alojadas en el tejido adiposo de la capa más profunda de la piel, la hipodermis.
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Es necesario adoptar medidas necesarias para combatir la celulitis o piel de naranja[/caption]
De ahí que sea un “plan nuestro de cada día”. Plan en el que el estilo de vida pasa por evitar las prendas excesivamente ajustadas que entorpezcan la circulación linfática y sanguínea o los tacones de vértigo; llevar una alimentación lo más sana posible que evite el exceso de azúcares ( no dejes de mirar las etiquetas de los productos más “light”, porque algunos contienen los odiosos “azúcares añadidos” camuflados bajo el nombre de hidratos de carbono, si éstos sobrepasan los 2 gr., malo), las bebidas alcohólicas de alta graduación, los alimentos refinados y precocinados y la fast food. Plan que incluye un poco de ejercicio (caminar 30 minutos al día es sanísimo) y una rutina cosmética corporal cosmética que refuerce los tejidos de la piel, que ayude a drenar y reafirmar.
¿Más? Sí, es muy recomendable realizarse un tratamiento de choque con aparatología, que complete el plan, protocolo que hay que realizar con tiempo y constancia. Son muchos los aparatos que pueden ayudar a remodelar las curvas a la vez que mitigan la flacidez (que acompaña con mucha frecuencia a la celulitis, aunque no siempre) y reducen visiblemente los cúmulos grasos más localizados ( ya sabes, cartucheras, glúteos, flancos, caderas,…).
Todos requieren de un diagnóstico previo por parte de la esteticista, que marque las pautas a seguir, el número de sesiones, la periodicidad e, incluso, si es necesario combinar varias tecnologías para conseguir el objetivo deseado.
En los Centros Carmen Navarro hemos introducido un aparato muy completo ZIONIC, conocido también como “La medusa reductora”, que es capaz de estimular el tejido muscular y dérmico en profundidad y activar los procesos fisiológicos de recuperación del tejido, con el objetivo de reducir, drenar, reafirmar, tonificar y relajar.
Su cabezal ergonómico, combate la flacidez, celulitis y grasa localizada, ya que combina el masaje activo rotacional profundo (MARP) y radiofrecuencia resistiva (RF) en un mismo dispositivo. Diseñado para alcanzar resultados de máxima efectividad, debido a su triple acción dérmica, vascular y muscular, son necesarias un mínimo de 10 sesiones, número que puede variar dependiendo de cada cuerpo.





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