Lo primero que os vamos a aclarar es porqué es importante hacernos un tratamiento detox. La respuesta es clara. Antes de iniciar cualquier tratamiento necesitamos eliminar toxinas. No podemos olvidar que la linfa es como el camión de la basura. Es el encargado de llevar todos los deshechos que se producen en el proceso de nutrición que realizan nuestras células.
Si ese “transporte” no funciona de manera correcta se producen edemas, quedando detenidos y estancados líquidos y sustancias. El drenaje linfático se encargará de ayudar a “desatascar” y liberar esas áreas arrastrando los líquidos al sistema circulatorio. Tampoco debemos olvidar que el sistema linfático cumple con una función de defensa fundamental gracias a los ganglios linfáticos y que debemos cuidar.
¿Por qué es importante realizar un tratamiento detox con los cambios de estación o antes de empezar tus vacaciones?
Porque los cambios de estación afectan a nuestro organismo, también a nuestro estado anímico. Necesitamos estar preparadas por dentro y por fuera. Nuestra piel también se ve afectada por estos cambios. Necesitamos un revitalizador que nos ayude en esos momentos de cambio. Y en estos casos necesitamos un tratamiento detox que nos ayude a reducir la inflamación, a reactivar la circulación linfática, eliminando los deshechos del organismo.
¿Qué conseguimos con un tratamiento detox?
Los ganglios linfáticos recuperan su funcionamiento correcto, y de manera paralela, mejoramos el aspecto de la piel. Sin olvidar el efecto relajante conseguido. Es clave para nuestra salud y para mejorar nuestra calidad de vida. También mejora la circulación sanguínea, los nutrientes llegan mejor a nuestros tejidos. Además, durante la sesión, empezamos a liberar esas toxinas y deshechos que estaban “atrapados”.
¿En qué otros momentos o situaciones es bueno realizar un tratamiento detox?
Después de una enfermedad. También después de situaciones puntuales en las que hemos tenido una época de estrés. O cuando queremos realizar un tratamiento exprés para ponernos a punto, por ejemplo para irnos de vacaciones. Previamente debemos realizar un detox si queremos obtener los mejores resultados.
¿Y cuándo hay que repetirlo?
Depende de cada caso, debemos personalizar, incluso puede afectar el tipo de vida que llevemos. Por ejemplo las personas que viajan mucho, especialmente en avión. Esas personas necesitan con más frecuencia este tipo de protocolos. También aquellos que cambian los ritmos circadianos por jetlag o por trabajo y aquellos que trabajan 24 horas seguidas.
¿Cuáles son los tratamientos detox top en Carmen Navarro?
Nuestra filosofía siempre ha ido encaminada a conseguir resultados globales. Un 360 en el que de poco nos sirve estar bien por fuera si no lo estamos por dentro. Por eso, si hay algo que nos distingue de otros centros de belleza es la manera en la que enfocamos nuestros protocolos. Desde el diagnóstico hasta su puesta en marcha y su desarrollo. Clave siempre: comenzar con un protocolo detox.
¿Nuestra estrella? El masaje linfático. Los beneficios que aporta son prácticamente infinitos. Es clave para mantener el sistema linfático en perfecto funcionamiento. Con el drenaje conseguimos reducir la inflamación. Todo gracias a que reactivamos la circulación linfática, eliminando los deshechos del organismo. Los ganglios linfáticos recuperan su funcionamiento correcto, y de manera paralela, mejoramos el aspecto de la piel.
Tampoco podemos olvidar el efecto relajante conseguido, clave para nuestra salud y para mejorar nuestra calidad de vida. También mejora la circulación sanguínea, los nutrientes llegan mejor a nuestros tejidos. Ya durante la sesión, empezamos a liberar esas toxinas y deshechos que estaban “atrapados”.
¿Cómo se realiza un denaje linfático?
Lo realizamos con maniobras suaves, con movimientos repetitivos y lentos siguiendo el camino de los conductos linfáticos. Son movimientos de bombeo. Con presiones que, insistimos, buscan eliminar las toxinas de manera natural a través de la linfa. Es indoloro, relajante y dura al menos 60 minutos.
¿Cuál es la respuesta de nuestro organismo?
Conseguiremos mejorar de manera muy visible el aspecto y la salud de la piel, facilitar la circulación sanguínea y, de manera paralela, fortalecemos la musculatura, consiguiendo aportar luminosidad a la piel y provocar un efecto de rejuvenecimiento paralelo. Si además sufres estrés y/ o cansancio, su efecto balsámico es absoluto.
Otro tratamiento detox imprescindible: LPG
Se trata de un masaje mecánico que realiza de manera paralela una aspiración sincronizada. Logra movilizar y liberar la grasa localizada. Además activa el sistema circulatorio y el drenaje linfático, y estimula a los fibroblastos. ¿Con qué objetivo? Con el de hacerles trabajar para que produzcan ácido hialurónico, colágeno y elastina nuevos.
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Los resultados del tratamiento se potencian gracias a la aplicación en cabina de cosméticos específicos. Como es el caso del Gel Lipo-Reductor con cafeína pura y extracto de algas rojas. Su suma multiplica por cuatro la liberación de la grasa localizada.
También contiene extracto de coral vegetal que se adapta al biorritmo de las células grasas. Evita que, durante la noche, la grasa se acumule y por lo tanto, la formación de nuevos adipocitos. Duurante el día, estimula la lipólisis para eliminarla.
Los objetivos conseguidos son varios: combate eficazmente la grasa localizada resistente a la dieta y al ejercicio. Mejora la circulación, reduce volumen. Y si nos centramos en zonas como las piernas, alivia la sensación de pesadez e hinchazón. Además en la misma sesión reafirma el tejido en una misma sesión.
